Población, la mayor parte joven, experiencia en el ámbito internacional, formación y cualificación. Estos son algunos de los elementos que aportan a Galicia los gallegos residentes en el exterior que toman la decisión de regresar a la Comunidad para instaurar en ella su proyecto de vida y que cuentan con diferentes bolsas de ayudas, programas y una estrategia integral que el Gobierno gallego acaba de renovar para duplicar su inversión en los próximos cuatro años y facilitar que retornen a la Comunidad a 30.000 gallegos.
"Yo lo que quería era volver, y poder dedicarme aquí a esto. Ahora también aporto la experiencia internacional". La que habla es Paula Cacheiro, una coruñesa que salió al extranjero para poder dedicarse a su sector, los recursos humanos, y ampliar sus horizontes. En 2017, en la primera convocatoria de las Bolsas de Excelencia Mocidade Exterior (BEME) optó por regresar a Galicia y montar aquí su proyecto de vida.
Estuvo en Alemania, primero, y luego en Chipre. En Galicia, pudo cursar un master de la Secretaría General de Emigración y, posteriormente, montar con apoyo de la Xunta una empresa de recursos humanos en Vimianzo, desde donde trabaja para varios países.
En una entrevista a Europa Press, Paula Cacheiro reconoce que su intención era regresar, incluso antes de recibir la BEME. "Quería venir sí o sí, pero, psicológicamente, con esta beca tienes un plan, no vienes sin nada", señala.
De lo que le ha aportado, destaca la formación, que la enfoca "más en la profesión" y la orientación laboral. Del resultado, la posibilidad de aportar desde Galicia la "experiencia internacional" que ha ido atesorando.
Las BEME unen sus caminos a Galicia, pero sus circunstancias son totalmente distintas. Marcelo Daparte es nieto de un gallego emigrado a Brasil en los años 50 que en 2016 decidió tomarse "un año sabático" para incrementar su formación en la Comunidad gracias a las ayudas de la Xunta.
Vino con su mujer, y en Santiago cursó el Master 'Tecnologías de datos masivos. Big data', pero "sin intención" de quedarse. "Estando a mitad de la formación, decidí quedarme de la noche para la mañana. Aquí vivo muy bien", explica a Europa Press Daparte, que trabaja en una empresa del sector en Santiago, donde está a cargo de un equipo de 10 personas. Su mujer, de la que ahora está separado, y su hijo, siguen también viviendo en Galicia.
El caso de Marcelo Daparte es el de un descendiente de emigrantes gallegos que ha optado por volver a la tierra de sus abuelos. Comenta que la adaptación cultural, en su caso, no fue difícil, dado que en Sao Paulo siempre mantuvo mucha relación con el centro gallego. No obstante, sí se pensó el venir a Galicia por el miedo a "estar solo". "Toda mi familia está en Brasil, aquí no tenía a nadie", ha apuntado.
Para los gallegos que están en el exterior, Marcelo Daparte apunta que la cuestión "más complicada", incluso más allá de la financiera, es el "miedo a la adaptación" lejos de su tierra natal, así como que en ocasiones dejan trabajos estables. Daparte tenía en Brasil una empresa, "vivía bien", por lo que la beca de la xunta supuso "un incentivo" para animarse a "cruzar el charco". "Al ser algo oficial, te da respaldo", asegura.
En la misma línea, apunta que conoce algún caso de algún retornado, con menos contacto previo con la cultura, que ha regresado a su país por "no encontrar su lugar". De hecho, señala, de las diferentes ramas de apoyo que desarrolla la Xunta en la Estrategia Galicia Retorna, "una de las más importantes es la de ámbito social", que les facilita desde trámites hasta conocer cómo moverse por su nuevo lugar de residencia.
La intención de la nueva Estrategia Galicia Retorna 2023-2026 es que regresen a la Comunidad en cuatro años unos 30.000 gallegos, lo que supondría traer unos 7.500 cada año. De ellos, el Gobierno gallego calcula que en torno al 60% (18.000) serán menores de 45 años.
Así lo ha apuntado, en una entrevista concedida a Europa Press, el secretario general de Emigración, Antonio Rodríguez Miranda, que ha destacado el éxito de estas medidas y el interés por los gallegos en el exterior por venir y trabajar en su tierra. La anterior estrategia, recién finalizada, se ha saldado con el retorno de 28.000 personas, "un éxito", teniendo en cuenta que en su desarrollo mediaron dos años de restricción de movilidad por la pandemia. De ellos, señala Rodríguez Miranda, "el 60% tiene menos de 45 años y el 80% menos de 65 años, están en plena vida activa".
La cualificación y experiencia de este grupo es una de las patas en la que se asienta el retorno, reconoce el secretario general. La principal, no obstante, es "el derecho de los gallegos que residen en el exterior" de regresar, unido a la necesidad que tiene Galicia de un relevo generacional y de invertir su pirámide demográfica.
La llegada de familias jóvenes residentes en el exterior es un punto en contra de la crisis demográfica, recuerda el Gobierno gallego, al tiempo que también destaca que estas personas, sobre todo las jóvenes, llegan a Galicia con una importante formación, cualificación laboral y experiencia en sus países de origen --40 países distintos en la última estrategia--.
"Esto dota a nuestro tejido productivo, a nuestras empresas, de personas con conocimientos en distintos mercados del mundo", señala Rodríguez Miranda, lo que permite a las empresas "salir mejor al exterior" y tener "más capacidad de éxito".
El Consello de la Xunta aprobó esta misma semana la nueva Estrategia Galicia Retorna 2023-26, que duplica tanto en número de medidas como en inversión a su predecesora, y tendrá una dotación global de 450 millones de euros para el desarrollo de 100 medidas que implicarán a todos los departamentos del Gobierno gallego.
De las cuatro áreas en las que incide esta estrategia, la que se refuerza con más intensidad es la laboral, que incluye 37 de las 100 medidas planteadas. Asimismo, desarrolla 30 medidas del ámbito educativo, 25 del social y ocho de asesoramiento, seguimiento, coordinación y control.
Entre otras líneas de actuación, la estrategia permitirá proporcionar instrumentos de atracción profesional de la población gallega residente en el exterior y facilitará su incorporación al mercado laboral a través de medidas específicas, al tiempo que se le proporcionan plataformas de gestión, asesoramiento y seguimiento.
También se intensificará el apoyo al emprendimiento y al autoempleo, en especial en el rural, se facilitará el acceso a la vivienda, se promoverá la continuidad educativa tanto de los retornados como de sus familiares, y se facilitará la participación en los programas de inclusión sociolaboral.
Rodríguez Miranda ha destacado, en particular, el refuerzo de las oficinas de asesoramiento y seguimiento al retornado, que actúan como "ventanilla única" desde la que hacer un enfoque personalizado y un seguimiento de cada persona o familia.
De sus servicios, la Xunta hace en la nueva estrategia un especial hincapié en el asesoramiento laboral, con la inclusión de orientadores, así como en el asesoramiento y seguimiento individualizado de cada caso, con un itinerario de integración que se mantiene hasta que la familia en cuestión lo necesita. "Nunca los dejamos, siempre tienen a sus asesores para consultarles cualquier cosa", señala el secretario general.