Vestidas de negro en señal de "luto" por su "desesperada" situación, las empleadas de Acasa también han utilizado un ataúd con un epitafio en el que podía leerse "Pilar nos mató y María José nos enterró" --en alusión a la anterior y la actual alcaldesa, la socialista Pilar Sánchez y María José García-Pelayo (PP), respectivamente--.
Fuentes del comité de empresa han indicado a Europa Press que la plantilla sigue sin saber cuándo se va a efectuar el ingreso de la transferencia que tiene que realizar la Junta de Andalucía en materia de dependencia correspondiente a los meses de noviembre y diciembre para costear una parte del servicio. Según las mismas fuentes, algunas empleadas ya se están planteando iniciar una huelga de hambre para reivindicar sus salarios.
Más de 450 personas, en su mayoría mujeres, prestan sus servicios en esta concesionaria municipal. Entre las protestas que han venido realizando, cabe destacar que la semana pasada irrumpieron en el Pleno municipal para exigir soluciones a la alcaldesa, semanas antes se encadenaron al Belén municipal y lo empapelaron con carteles reivindicativos, además de los cortes de tráfico que han venido provocando en diversas jornadas.
