Ésta se presenta como una de las medidas solicitadas por la coordinadora de agricultores a las administraciones públicas para evitar que el aceite en origen siga bajando, hasta tal punto que las cosechas “no están siendo rentables para los agricultores”, que en relación al pasado año reciben 80 céntimos menos por cada kilo de ‘oro verde’ producido, lo que sitúa el precio actualmente en unos 1,80 céntimos.
Después de recibir el apoyo de la Consejería de Agricultura, sólo hace falta que el Ministerio del mismo ramo se pronuncie para pedir permiso a la comisaría competente de la Unión Europeo, desde donde se deben autorizar este tipo de “mecanismos de control del mercado”.
Ayer viernes, 20 de marzo, COAG organizó en Jaén una movilización conjunta del sector del olivar en la que participaron más de 200.000 agricultores. Las organizaciones agrarias demandan una ley de contratos que establezca unos precios de base para los productores, a la vez que mecanismos comerciales que eviten el diferencial de precios entre lo que paga el consumidor y lo que percibe el agricultor.