IU resalta que “hace unos días, hemos sabido que la Junta de Andalucía decretó el cierre de las instalaciones de una empresa en El Puerto de Santa María por los malos olores que se desprendían de su actividad. Ha sido posible porque el alcalde y su equipo de gobierno formado por IU y Levantemos se pusieron al frente de las movilizaciones de los vecinos afectados para defender sus derechos obligando a la Delegación Provincial de Medio Ambiente a intervenir, decretándose el cierre de la empresa, una vez constado los términos de la denuncia vecinal”.
Añade que es lo que ocurre cuando un alcalde y un equipo de gobierno anteponen los intereses de los vecinos por los intereses de una empresa. Lamenta que todo lo contrario a lo que ocurre en Sanlúcar respecto a los continuos malos olores, a los vertidos de aguas residuales sin la debida depuración y a las también continuas irregularidades que viene cometiendo la empresa concesionaria servicio del ciclo integral del agua, Aqualia.
Señala que “el alcalde, Víctor Mora, no sólo no antepone los intereses de los vecinos frente a los de la multinacional Aqualia, sino que apuesta por afán desmedido en proteger a la multinacional, amparando sus desmanes y buscando toda clase de justificaciones aunque sean las más disparatada, tal como hizo el portavoz municipal, Juan Oliveros, cuando achacó como causa de los malos olores al calor, a las mareas y a los vientos”.
Recalca que el último episodio de “este extraño y cuando no sospechoso comportamiento del PSOE de Víctor Mora en todo lo que concierne a Aqualia, lo hemos tenido en el pasado pleno. En el que nuevamente se opuso, sin justificación alguna, a que la concesionaria sea fiscalizada en su actividad por una comisión formada por los grupos municipales y las distintas plataformas que vienen denunciando las consecuencias que tiene sobre calidad de vida de los ciudadanos la mala praxis que viene desarrollando la concesionaria”.