Málaga tomará en 2018 el relevo de Nimes y albergará la salida de la 73 Vuelta a España, también con una contrarreloj, en lo que será un salto del sur de Francia al sur español.
El director de la ronda española, Javier Guillén, ha revelado en la ciudad francesa, antes del comienzo de la 72 edición, el punto de partida de la carrera que se disputará del 25 de agosto al 16 de septiembre de 2018.
Guillén anunció, en presencia del alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, y del presidente de la Diputación provincial, Elías Bendodo, acompañados por el teniente de alcalde de la ciudad nimeña, Julien Piantier, que la ciudad andaluza acogerá el comienzo de la próxima edición, aunque no precisó si la contrarreloj será individual o por equipos.
Guillén calificó el acto de presentación de la carrera como "el más importante de cada edición, sobre todo teniendo en cuenta que tanto el final de la Vuelta en Madrid como el del Tour de Francia en París, suponen el colofón de ambas pruebas.
"No es un proyecto de ciudad, es un proyecto de provincia", subrayó en la puesta de largo de un acontecimiento que acogerá la capital malacitana por tercera vez en la historia de la Vuelta, tras las salidas en 2000 y 2006, así como los cuatro que tuvieron lugar en ciudades de la provincia, Fuengirola (1972 y 1975), Estepona (1976) y Puerto Banús (2015).
Además la capital malagueña ha acogido a lo largo de su historia hasta en 16 ocasiones la salida de una etapa de la ronda española, la primera en la segunda edición en 1936, en una jornada que llevó al pelotón desde Málaga hasta Granada.
Francisco de la Torre destacó que el trabajo entre las instituciones ha sido conjunto en lo que calificó como "una noticia importante" por lo que supone de foco de proyección mediática porque se trata de "un gran acontecimiento".
Además dio las gracias a la "flexibilidad" en las fechas para que este acontecimiento no coincida con el final de la feria malagueña, y que de la Torre recordó que este año finaliza hoy.
Aunque en la presente edición los ciclistas no visitarán Málaga pero pasarán muy cerca el próximo 31 de agosto en la 12ª etapa entre Motril y los Dólmenes de Antequera, el primer edil prometió "un guiño" con la prueba, emplazando a todos con un "nos vemos allí".
De la Torre insistió en que uno de los secretos del éxito de la Vuelta cuando vista su tierra es que "hay una buena afición" y en la excelente combinación "fotogénica" tanto de la ciudad como la provincia, así como la presencia de costa, montaña e interior, y por eso "la gente se vuelca".
Otro aspecto no menos importante es disponer de una importante oferta hotelera y gastronómica que permiten acoger sin problemas a las alrededor de 2.000 personas que mueve cada día la Vuelta.
Por su parte, Bendodo recordó que en 2003 cuando era concejal de deportes ya veían la Vuelta como "una gran plataforma de comunicación" y es "el mejor embajador que se ve en todo el mundo" y permite poner en valor espacios únicos, como el Caminito del Rey y en este sentido apuntó que "Málaga recoge la esencia de todo lo que puede ofrecer el país".
En el aspecto deportivo y de recorrido, Guillén no quiso desvelar sus intenciones aunque reconoció que "siempre nos gusta descubrir algo" y por eso "ya tenemos algunas cosas vistas para algún final de etapa en altillo o en alto".
También recordó los nexos de unión entre la salida de la presente edición de la Vuelta, la localidad francesa de Nimes y la provincia de Málaga a través del torero José Tomás porque él fue el que permitió iniciar los contactos para la salida nimeña y "nos llevó a conocer el final malagueño de Peñas Blancas, donde el entrenaba en bicicleta para recuperarse de una cogida".
