El alcalde y candidato del PP a la reelección, José María García Urbano, ha destacado que los 'populares' en la localidad son "garantía de eficacia, cumplimiento de la ley y de gestión responsable de los recursos públicos". Así, se ha referido al pago realizado ya de más de 180 millones de euros "de la deuda heredada de 300 millones que dejó el PSOE en junio de 2011", lo que supone una reducción de más del 60 por ciento, comprometiéndose a acabar de pagarla en el año 2023.
En la actualidad, esta deuda se sitúa en 120 millones y prevé que, si continúa el PP al frente del Ayuntamiento, "a finales de este ejercicio, se habrá reducido a 100 millones de euros y en 2023 estará pagada en su totalidad". De esta forma, ha anunciado que en ese momento, el equipo de gobierno del PP llevará a cabo una rebaja del 50 por ciento en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI).
"Por la mala gestión e irresponsabilidad de los anteriores gobiernos, cada semana se paga una media de 500.000 euros de esta deuda heredada; una importante cantidad económica que se podría destinar a invertir en la ciudad si no existiera este lastre heredado de los anteriores gestores municipales que, de nuevo, pretenden volver a gobernar la ciudad", ha sostenido el número uno.
En estos ocho años de gobierno del PP, ha dicho, "el Ayuntamiento tiene todos sus magnitudes económicas en positivo"; pasando, ha dicho, "de la ruina y la quiebra en la que los socialistas dejaron el Ayuntamiento en 2011 a la estabilidad, bajada de impuestos, recuperación e inversión pública".
Al respecto, ha indicado que, al tiempo que se ha pagado deuda se ha llevado a cabo la mayor modernización y transformación de la ciudad. En concreto, ha recordado que el equipo de gobierno no ha generado más deuda y ha pagado todos los servicios y obras contratadas.
Ha indicado que se ha saldado "en su totalidad la deuda heredada con la Junta de Andalucía por el uso indebido o no justificado de subvenciones" concedidas por la Administración andaluza al anterior gobierno del PSOE --seis millones de euros--; la deuda heredada con la Agencia Tributaria --18 millones--; con la concesionaria del servicio de aguas --ocho millones de euros-- y ha abonado más de la mitad de los 66 millones de euros del Plan de Pago a Proveedores suscrito en 2012, derivado en su totalidad de las facturas impagadas por los socialistas entre 2009-2011.
"Subir el IBI al máximo legal, crear la tasa de basura en 2008, aumentar los valores catastrales y generar deuda; esa fue la política económica del PSOE junto a sus socios de gobierno en Estepona; hasta 2023 nos vamos a seguir acordando de ellos porque hasta esa fecha vamos a tener que seguir pagando la mala gestión que hicieron en la ciudad", ha enfatizado García Urbano.
En materia de impuestos, ha subrayado que el PP puso en marcha desde el primer año su compromiso de reducir los impuestos a los ciudadanos. De esta forma, el IBI y la tasa de basura acumulan ya una reducción del 20 por ciento para todos los ciudadanos.
Este hecho, ha añadido, ha generado "desarrollo económico en la ciudad y ha contribuido a fomentar la creación de empleo y a apoyar a los más desfavorecidos con medidas pioneras como la eliminación de la tasa de apertura para negocios o la eliminación del pago de la plusvalía a aquellas personas víctimas de embargos o desahucios".
