La jornada del 10 de noviembre dejó en Huelva un mapa de la provincia teñido de un rojo intenso, el del PSOE, que logró imponerse en 72 de los 80 municipios de la provincia, a los que hay que sumar dos ELA que también optaron por los socialistas como primera fuerza. Por ello, no es de extrañar que todo fueran sonrisas y caras ilusionadas este lunes en la sede del PSOE.
Su secretario provincial, Ignacio Caraballo, comparecía junto a los tres diputados y tres senadores electos para valorar los “magníficos” resultados y presumir de cifras: más de 91.000 votos en la provincia, unos 39.000 votos de diferencia con la segunda fuerza más votada (Vox) y 42.000 con la tercera (PP), además de ganar en todos los partidos judiciales.
Tras resaltar el “momento dulce” que atraviesa el PSOE en la provincia, Caraballo destacó que si han sido los más votados es porque “somos el partido de la normalidad, de los avances, de las libertades y de los derechos”, y por ello pidió un “deseo”: “Que nadie nos bloquee”, porque “necesitamos un Gobierno sólido, estable, para echara andar definitivamente”.
Sobre el avance de la extrema derecha en la provincia, donde ha sido la segunda fuerza más votada, el socialista cambió el rictus y reconoció sentir “preocupación”, aunque también se mostró optimista al pensar que “más pronto que tarde la gente se dará cuenta de que ese no es el camino”.
De hecho, se mostró confiado en que cuando el Gobierno de Pedro Sánchez empiece a funcionar, “la gente se dará cuenta de que la extrema derecha no tiene espacio en este país”.
No obstante, las cifras del 10N dicen lo contrario, pues además de ser la segunda fuerza más votada en la provincia, Vox ha sido la primera opción en cinco municipios. Así, según los datos del Ministerio del Interior, destaca la victoria de la formación de Santiago Abascal en Lepe, donde el PP gobierna con mayoría absoluta, así como en Cumbres de Enmedio -el municipio más pequeño de la provincia-, Isla Cristina, Cartaya y Lucena del Puerto, zonas con un marcado carácter agrícola. Pese a la hegemonía socialista, muchas localidades han tenido a Vox como segunda fuerza, como Almonte, Bollullos Par del Condado, Rociana del Condado o la capital onubense.
En la comarca de la Costa Vox tuvo bastante respaldo, ya que en Ayamonte fue la tercera fuerza, la segunda en Almonte, primera en Cartaya, Isla Cristina y Lepe y segunda en el municipio de Punta Umbría.
En la comarca de la Sierra, con un marcado carácter de izquierdas, el PSOE se impuso, como ha ocurrido también en la Cuenca Minera, ya que incluso en localidades donde gobierna IU, como Encinasola, el PSOE fue la lista más votada.
Resulta destacable que Unidas Podemos no haya logrado imponerse en ningún municipio como primera fuerza pero haya conseguido ser la segunda fuerza política más votada en Alájar, Fuenteheridos, Aracena, Zalamea la Real o Campofrío, pero esto no la ha permitido mantener el diputado que logró en el comicios de abril y se ha quedado sin representante por la provincia.
Por su parte, el PP fue la fuerza más votada en las localidades de Palos de la Frontera y La Palma del Condado, feudos de los candidatos Carmelo Romero y Manuel García Félix, que gobiernan en sus localidades con mayorías absolutas. Asimismo, fue la primera fuerza en Sanlúcar de Guadiana.
También resulta llamativo que el escaño logrado por el PP en el Senado no corresponda al primer candidato, Juan José Cortés, sino al segundo, José Enrique Sánchez.
En su perfil de Facebook Cortés ha trasladado su “más sincera enhorabuena al PSOE por su victoria, a Vox por el subidón y a Pablo Casado, por los buenos resultados obtenidos”, al tiempo que ha felicitado “a los que han conseguido sus escaños, tanto en el Senado, como en el Congreso”.
“Por lo que a mi me toca, gracias a todos lo que han depositado su confianza en mí, lo he hecho lo mejor posible pero a veces las cosas no salen como uno quiere, no he conseguido el escaño como senador, aunque en estas elecciones ya era cadáver antes de entrar en la UCI”, ha escrito.
