El presidente de EE.UU., Donald Trump, insinuó que podría perpetuarse en el poder durante 9 o 13 años más, lo que iría contra la Constitución del país que establece un máximo de ocho años.
El mandatario hizo esas declaraciones en una fábrica de suministros médicos en Allentown (Pensilvania), donde aseguró que su predecesor, Barack Obama (2009-2017), tiene la culpa de que EE.UU. no dispusiera de suficientes mascarillas y ventiladores al comienzo de la pandemia del coronavirus.
A continuación, prometió: "Nunca más ningún presidente heredará estanterías vacías o productos caducados, al menos esperemos que hasta dentro de cinco años, eso es lo que están diciendo, o quizás 9 años, quizás 13 años, pero nunca tendremos que lidiar con estanterías vacías o con unas fuerzas armadas mermadas".
El mandato de Trump comenzó en enero de 2017 y termina el mismo mes de 2021, aunque opta a la reelección en los comicios de noviembre de este año y, por tanto, si gana al exvicepresidente Joe Biden, posible candidato demócrata, dispondría de un segundo mandato desde enero de 2021 hasta 2025.
La Constitución de EE.UU. establece que el mandato de cualquier inquilino de la Casa Blanca dura 4 años y puede presentarse a la reelección una sola vez, por lo que sería ilegal optar a dos o tres mandatos más, lo que equivaldría respectivamente a los 9 o 13 años mencionados por Trump.
En otras ocasiones, el líder estadounidense ha mencionado su deseo de mantenerse en el poder más allá de lo establecido por la Carta Magna y, durante la campaña presidencial de 2016, amenazó con no aceptar los resultados electorales si resultaba ganadora la demócrata Hillary Clinton.
En la fábrica de Pensilvania, Trump no llevó ninguna mascarilla y pronunció su curso sobre un escenario con una enorme bandera estadounidense.
Además, se burló de Biden, al que llamó "Sleepy Joe" (Joe, el adormilado). y aseguró que, durante años, el Gobierno estuvo controlado por un "montón de globalistas que no sabían lo que estaban haciendo" y que, a su juicio, daban prioridad al mundo por encima del pueblo estadounidense.
"Conmigo siempre va a ser EE.UU. primero", repitió en varias ocasiones.
En los últimos días, Trump ha incrementado sus ataques en Twitter contra Biden y Obama, quien hace unos días calificó de "desastre caótico" la respuesta de su sucesor a la pandemia.
Esas fueron las críticas más duras a Trump por parte de Obama, quien suele mantenerse en un segundo plano pero que este jueves volvió a la carga con un breve mensaje de Twitter que ganó mucha popularidad y que solo contenía una palabra: "Vote" (Voten, en inglés).
Mientras se aviva la batalla política, EE.UU. sigue siendo el mayor foco del mundo de la pandemia por el nuevo coronavirus en términos absolutos, con más de 1,4 millones de casos y al menos 84.000 muertes, según el recuento de la Universidad Johns Hopkins.