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Lunes 25/11/2024
 
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Andalucía

Los Jaguares de la Bahía rescatan la canción "Love Comes To Me"

Una canción rescatada del olvido por la banda de El Puerto de Santa María y traída al aquí y al ahora gracias a la Inteligencia Artificial

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Los Jaguares de la Bahía, nuestros felinos favoritos, se atreven a usar la Inteligencia Artificial para terminar una canción cuyos primeros compases se grabaron allá por 2012. "Love Comes To Me", que así se llama este single, es una balada de ecos cincuenteros y momentos épicos con una voz celestial y... pues eso, artificial.

Escúchala aquí:

https://drive.google.com/file/d/10HtJeufpCVC-5USqDlGv5JKzS2yaMaCx/view

Que una banda que ha hecho del DIY, o lo que es lo mismo, nuestro "yo me lo guiso, yo me lo como", su razón de ser y que, reconozcámoslo, también parecen disfrutar en cada nueva idea y cada nuevo concierto de la planicie de sus encefalogramas, recurriera a la IA estaba, nunca mejor dicho, cantado.

Y así ha ocurrido por fin: "Love Comes To Me" es, como ese tan comentadísimo "Now And Then" de los mismísimos Beatles, una canción rescatada del olvido y traída al aquí y al ahora gracias a la Inteligencia Artificial.

Pero dejemos que sean los propios Paco Loco y Pablo Errea, miembros junto a Patri Espejo de Los Jaguares de la Bahía, quienes nos cuenten cómo, cuándo y por qué se han sus caminos...

AI, AI, AY... por Paco Loco:

AI, AI, AI, AI ¡con la inteligencia artificial! Y ahora, ¿qué?… Cuando me preguntan que qué opino de la inteligencia artificial mi contestación es siempre la misma: me da exactamente igual. De una u otra manera llevo usándola toda mi vida, pero, claro, de manera sutil; que no diera la impresión de que estaba inmiscuyéndose (jolín con la palabra, tuve que buscar en Google cómo se escribía... Inteligencia auténtica la mía para usar la artificial). Primero fueron los músicos clásicos los suplantados por los mellotrones, los sintes que emulaban orquestas, y no pasaba nada. Luego los baterías con las cajas de ritmos que cada vez son más reales, hasta el punto de que ya no se pueden distinguir; incluso la sustitución de una batería que has grabado tú por sonidos que ha grabado alguien. Luego bajos y guitarras, y ya por último, las voces. Pero aquí, con las voces, ya empieza la gente a romperse las vestiduras, que hay que ver dónde vamos a llegar... (¿?) ¡Pues al mismo sitio al que venimos llegando desde hace cincuenta años o más! Para mí la suplantación es lo peor que le ha pasado a la música cuando se hace con el simple motivo de ahorrarte dinero. Cuando los Beatles usaron el mellotron, lo hacían de una manera creativa, haciendo cosas que un instrumento real no podía hacer. Pero cuando intentamos emular un cuarteto de cuerda porque no tenemos dinero (que yo lo he hecho, que no voy de auténtico), o cuando alguien graba una batería y pone todos los golpes en lo que se supone es su sitio y luego cambia los sonidos por otros… Es lo mismo que si tú cantas una canción y por medio de un programa le pones la voz de uno de tus cantantes favoritos, o la mezclas con los programas que mezclan solos: así lo único que consigues es sonar como tus grupos favoritos, sólo que con canciones no tan buenas.

Lo que tenemos cada uno de nosotros es único y eso es lo que tenemos que potenciar. Hace unos meses me escribió Rafa Camisón preguntándome si había visto ese programa (software) en el que podías elegir cantante y todo eso. Le dije que sí lo había visto, pero que no me interesaba nada. Y yo por llevar la contraria, que me la llevo hasta a mí... pues nada más acabar de hablar con él, abrí el programa y metí una canción que habíamos hecho Los Jaguares de la Bahía hace doce años. Y empecé a grabar con midi algunas notas, y a poner la letra en esas notas, y a elegir cantanta… Así surgió esta canción, "Love Comes To Me", que es la unión perfecta entre la estupidez natural y la inteligencia artificial. Yo prefiero la primera, la estupidez, porque la estupidez natural te sorprende todos los días (para bien o para mal), y la inteligencia artificial solo una vez: la vez que la usas por primera vez. Ya después hace lo que esperas de ella: algo perfecto, y eso aburre. No me malinterpretéis, no estoy en contra, pero nunca me gustó que me dijeran lo que tengo que hacer… Una de las frases que menos me gustan del mundo es cuando te encuentras a alguien y te dice: “Tú lo que tienes que hacer es...”. Eso lo odio y me da la impresión de que la AI hace eso. Lo divertido es hacerlo, no que te lo hagan. Hablo de música, en otros campos es mejor que te lo hagan, por ejemplo, tu casa.

Bueno, que me enrollo… Hicimos esta canción para ser pioneros y sacar la primera canción que yo conozca con voz por AI, pero por decir la verdad desde que la hicimos, allí por septiembre, no he vuelto a abrir el programa. Así que tiene pinta de que no lo vamos a usar más.

AI ai ai ai… canta y no llores.

LOVE COMES TO ME TOO… por Pablo Errea:

Es curioso cómo la inteligencia artificial ha contribuido a refrescarnos la memoria natural. Cuando escucho los acordes de esta canción no puedo evitar acordarme de cuando empezamos Los Jaguares de la Bahía los años 2012, 2013, y lo compaginamos con Los Panteras, que éramos los mismos (o sea, Esteban Perles, Paco y yo) pero en acústico, en un formato para tiendas de discos, librería y tiendas de ropa. Los Panteras desaparecieron cuando desaparecieron las tiendas. Eso nos permitió centrarnos en una cosa y poner en marcha Los Jaguares con la ayuda de Patri Espejo y Chuchi Cabral.

La canción que se publica ahora son unos acordes de Paco de los que yo apenas me acordaba. Ha sido un buen rescate. Todavía quedan por rescatar diez u once canciones más de los primeros años. Pero esto será otra historia, cuando llegue. Aunque las guitarras son inconfundibles, quizás resulte extraño escuchar a Los Jaguares sonando con batería acústica. Los primeros años tocaba la batería Esteban Perles. Su presencia y su sonido definieron al grupo también; voy a explicar cómo. Aunque ya lo hayamos dicho mil veces, si él no se hubiera marchado a vivir a Madrid, Los Jaguares no sonaríamos como sonamos ahora. Cuando él se fue finalmente, el grupo decidió seguir tocando sin batería. Así introdujimos las cajas de ritmos. Esteban es esencial incluso cuando no está.

Lo que más me gusta de sacar ahora esta canción de hace doce años a la que hemos añadido una voz artificial, es darme cuenta de que no hemos parado desde entonces.

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