Además de esta protesta, Coordinación rural prevé también para este viernes cortar algunas carreteras, como la A86 y la A4 al sureste de París
Al menos 66 personas fueron arrestadas este viernes en una protesta sorpresa organizada en la zona de los Campos Elíseos de París por el sindicato de agricultores Coordinación rural, que había llamado a "tomar simbólicamente" la plaza del Arco del Triunfo.
Los manifestantes se reunieron desde la madrugada en la plaza de Charles de Gaulle, también conocida como plaza de la Estrella por la confluencia de doce grandes avenidas parisinas, entre ellas la de los Campos Elíseos.
"Movilizados por todos, los agricultores de Coordinación rural se concentran en París. Acción rápida para salvar a nuestro 45 % de explotaciones en dificultades financieras", señaló la organización sindical en su cuenta de X.
La protesta movilizó a unos 150 manifestantes, que bloquearon el entorno del Arco del Triunfo con sus tractores y con paja, y se saldó con 66 arrestos, según confirmaron fuentes policiales a la cadena pública FranceInfo.
Además de esta protesta, Coordinación rural prevé también para este viernes cortar algunas carreteras, como la A86 y la A4 al sureste de París.
La movilización de este sindicato, al que se asocia con la derecha y la ultraderecha, se produjo solo unos días después de la presencia del presidente francés, Emmanuel Macron, el pasado sábado en el Salón Internacional de la Agricultura, que se celebra en París y es la feria más importante de este tipo en el mundo.
Macron había acudido hasta allí para inaugurar el evento, como es tradicional para los presidentes franceses, pero fue recibido con un fuerte rechazo del sector, abucheos y algunos incidentes violentos entre la policía y los agricultores.
El presidente -que pese a todo permaneció la jornada completa en el Salón en medio de un fuerte dispositivo de seguridad- se reunió allí con decenas de representantes del sector para explicar las medidas que planea su Ejecutivo y así intentar calmar las aguas.
Pero también acusó al sector causante de los incidentes más graves de estar allí por motivos políticos, en concreto asociados a la extrema derecha de Marine Le Pen, y no para defender los intereses del campo, que en los últimos meses ha protagonizado protestas en numerosos países europeos.