Los Frailes reclama una vez más contenedores para el reciclaje

Los vecinos de la barriada de Los Frailes llevan tres años esperando una respuesta del área de Medio Ambiente acerca de la colocación de contenedores de reciclaje en el barrio.
La asociación de vecinos, dirigida por Chari García, considera que ya ha pasado tiempo suficiente desde la primera reclamación como para que Medio Ambiente hubiera dado una respuesta positiva, es decir, hubiera colocado algunos contenedores repartidos por la barriada.
Como no ha ocurrido así, siguen reclamando los recipientes, puesto que hay un número importante de vecinos preocupados por reciclar y que se acabarán cansando debido a que no tienen el material idóneo para realizarlo.
García se hace eco de las reivindicaciones de los vecinos, y considera justas las afirmaciones de los mismos, ya que no entienden tener que trasladarse a La Florida o bien a la glorieta de Sudamérica para poder dejar sus bolsas de basura.
Consideran que cada barrio debe contar con ciertos contenedores que hagan posible que los vecinos tengan un soporte para dejar sus desperdicios, y ya son tres años los que los residentes de esta barriada llevan reclamando esta medida.
La presidenta de la entidad vecinal considera que no es una reivindicación que se exceda del presupuesto, y mucho menos desorbitada, pero ya son varios los concejales de distinto color político los que han pasado por el área y no han resuelto esta reivindicación. Entienden por tanto que es una cuestión de voluntad política más que de falta de medios,
Reiteran su malestar a la edil responsable del área, Beatriz Fuentes, y concretamente la presidenta se pregunta qué deben hacer para contar con los recipientes solicitados, puesto que han enviado escritos y han denunciado la falta de atención públicamente, sin que haya servido para que obtengan una respuesta positiva. García no quiere que los vecinos se cansen de reciclar sin obtener los contenedores necesarios, pero también considera que están siendo muy pacientes y que no sería achacable a una conducta incívica por parte de los vecinos si finalmente dejaran de reciclar.