A diferencia de otras vacaciones en las que priman las piscinas, los grandes bares y hoteles para pasarlo bien, estas vecinas, sin necesidad de disponer de tantos lujos, disfrutan entre ellas para poder pasar así un gran verano, lleno de risas y buena compañía.
El verano va terminando, y algunas de las vecinas que pasan los días en este barrio junto a sus familias, tienen que volver a sus quehaceres diarios, por ello, entre despedida y despedida, celebran sus cenas para disfrutar de los últimos días. Será la cena del pescaito frito la que pondrá fin en unos días a estas noches.
Una de las vecinas, Paqui González, asegura que le gusta salir todas las noches a pasar el rato, “es el mejor remedio para soportar el calor durante el verano y así disfrutar junto a mis amigas”. Además, “Llegamos a estar reunidas hasta las dos de la mañana todos los días, charlando y riéndonos”, añadió esta vecina.
Fueron los progenitores de estas vecinas los que, hace muchos años, iniciaron esta peculiar tradición que se ha convertido en el mejor lugar de vacaciones para muchas barriadas.
No todo son malas noticias
En el Polígono de San Benito no todo son desgracias, son estas vecinas las que con su alegría transforman las penas, que sufre en ocasiones esta barriada, por buenos ratos, cometiendo el único delito de pasarlo bien.