El Ayuntamiento de Córdoba ha comenzado los trabajos de rehabilitación de la futura sede de la Casa Árabe e Instituto Internacional de Estudios Árabes y del Mundo Musulmán en la capital, una obra que se ha licitado por 3.570.198 millones de euros y tiene un plazo de ejecución de 13,5 meses.
El ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, Miguel Ángel Moratinos, destacó ayer, tras poner la primera piedra de esta obra de rehabilitación, que la nueva sede de la Casa Árabe en Córdoba permitirá que la capital acoja a expertos, científicos y académicos que posibilitarán un “acercamiento de los pensamientos y conocimientos de los mundos islámico y europeo”.
Además, esta nueva sede, que demuestra la “base sólida” de la diplomacia pública del Gobierno de España con sus casas, como la de Sefarad o América, para que se conviertan en “plataformas de diálogo y encuentro”, también servirá para que los científicos que la visiten “se sientan como en casa”.
En este acto, Moratinos estuvo acompañado por su homólogo turco, Ahmet Davutoglu, quien valoró la rehabilitación de la Casa Mudéjar para convertirse en la sede de la Casa Árabe, pues este inmueble refleja el modo de aunar “varias tradiciones y civilizaciones”.
Davutoglu afirmó que cuando viaja a Córdoba se siente “como en casa”, porque la sociedad cordobesa y la de su país “comparten la misma estructura”, un hecho que está favorecido por que “Córdoba ha sido centro de tolerancia religiosa y actividad intelectual durante muchos siglos”.
Por su parte, el alcalde de Córdoba, Andrés Ocaña, ha destacado la importancia de dotar de esta nueva sede a la Casa Árabe, que ha definido como “lugar de encuentro, entendimiento y diálogo entre distintas culturas”.
Además, ha valorado que la elección de la Casa Mudéjar como futura sede de la Casa Árabe permite la recuperación de un inmueble que forma parte del “vasto patrimonio” cordobés.
La delegada del Gobierno de la Junta en Córdoba, Isabel Ambrosio, también incidió en la importancia de que la capital albergue una de las sedes de la Casa Árabe, en la que la administración regional invierte 1.700.000 euros para la organización de actividades.
La Casa Mudéjar, que se levanta en el corazón de la Judería, es el fruto de la adición de cinco casas diferentes y cuatro patios, un conglomerado de residencias enlazadas por galerías, un pasadizo y escalinatas.
La edificación, aunque la primera podría datar del siglo XIV, pertenece en su mayoría a los siglos XV y XVI. La casa, que se levanta sobre una parcela de 950 metros cuadrados, se distribuida en dos plantas.