El consejo de administración de CajaSur aprobó ayer asumir íntegramente el Plan de Reestructuración elaborado por Boston Consulting Group “como cuerpo básico de referencia” para su fusión con Unicaja, entendiendo que dicho plan “admite cierta flexibilidad en cuestión de empleo”.

Así lo dijeron a Europa Press fuentes de la caja cordobesa, que precisaron que el acuerdo adoptado ayer por el consejo de administración de CajaSur, reunido en sesión extraordinaria, se adoptó por 19 votos a favor y uno en contra, en este último caso el del sindicato Aspromonte, representante de los trabajadores.

Este voto en contra se ha producido a pesar de que el consejo de CajaSur señaló ayer, según informó la caja en un comunicado, que “ambas entidades reiteran su voluntad de poder alcanzar un acuerdo laboral que concite la máxima adhesión posible entre la representación de los trabajadores de ambas cajas”.

Aunque, a este respecto, “no podrá cerrarse un acuerdo laboral de fusión que no garantice y obligue fehacientemente a la consecución de las sinergias de costes de personal recogidas en el plan Boston Consulting Group”.

En este sentido, la caja cordobesa, al igual que hizo también ayer la malagueña Unicaja, da su respaldo al plan estratégico de negocio para la fusión de ambas, “basado en la idea principal de crear un proyecto viable, que fortalezca el motor económico y social” de su entorno geográfico, “en el que se propicie un trato justo, singular y equitativo para todos los colectivos e instituciones interesados en este proyecto de fusión y basado en el principio de unidad y autonomía empresarial”.

Unicaja ya había emitido un comunicado por la mañana informando de que el Consejo de Administración había aprobado el plan estratégico de Boston que la dirección de esta entidad y la caja cordobesa Cajasur cerraron el lunes, un día antes de que expirara el plazo dado por el Banco de España a la segunda de estas entidades para salvar los obstáculos en este proceso.

En el comunicado, casi idéntico al emitido por CajaSur, Unicaja señalaba que la viabilidad del proyecto “queda condicionada a la adecuación, certeza e irreversibilidad de las ayudas solicitadas”, concluye la nota.

El vicepresidente primero de Unicaja, Manuel Atencia, indicó a los periodistas que hay que esperar a que “el sentido de la responsabilidad se imponga” y a que las medidas que se planteen para el futuro se hagan con “inteligencia y flexibilidad” para cumplir así el objetivo fundamental que es crear “una gran caja de ahorros competitiva en Andalucía y en España”.

Por su parte, el sindicato mayoritario en CajaSur, Aspromonte, aplazaba ayer la manifestación que había convocado para mañana por la defensa del empleo en la caja y pedía la puesta en marcha de una mesa negociadora tras el principio de acuerdo de fusión.

El presidente de Aspromonte, José Ignacio Torres, dijo a Efe que el comité del sindicato se reunió ayer y decidió el aplazamiento sin fecha concreta si esto “ayuda al entendimiento y crea un buen clima de trabajo”, y aseguró que Aspromonte “no pondrá trabas a la fusión”.

Torres resaltó “el esfuerzo importante” y la “buena voluntad” de ambas entidades financieras para alcanzar un punto común de acuerdo, aunque anunciaba que su voto sería contrario “si no hay un acuerdo laboral”.

En este sentido, señaló que los empleos se tienen que tratar en una mesa negociadora con los sindicatos y recordó que, tal y como recoge el protocolo, “sin acuerdo laboral no hay fusión”.

Por su parte, los secretarios generales de la UGT-A, Manuel Pastrana, y de CCOO-A, Francisco Carbonero, llamaron ayer a la “tranquilidad” de los trabajadores de las tres cajas implicadas en la fusión y valoraron el acuerdo alcanzado entre CajaSur y Unicaja.

Tanto Carbonero, que consideró que habría sido “muy lamentable” que no se hubiera alcanzado el principio de acuerdo para la fusión de Cajasur y Unicaja, como Pastrana consideraron que el plan de negocios plantea los márgenes “suficientes” para negociar la viabilidad del empleo de los trabajadores de las cajas.