El Grupo de Especialistas en Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil localizó ayer por la tarde el cuerpo sin vida del policía nacional Carlos Calderón Arias a unos 400 metros del lugar donde se le vio por última vez en la playa de El Palmar, en Vejer de la Frontera. El agente, que estaba libre de servicio y se encontraba con su mujer en la playa, desapareció por la mañana tras arrojarse al mar para auxiliar a dos personas que se encontraban en apuros en una zona conocida por sus peligrosas corrientes, según ha informado la policía en un comunicado.
Según varias fuentes, se trataba de dos jóvenes irlandeses que se encontraban haciendo surf.
Tras activarse el dispositivo de rescate, hasta la zona se desplazó una embarcación de Salvamento Marítimo, la salvamar Atria, así como el helicóptero Helimer con base en Barbate.
Carlos Calderón, de 33 años de edad, estaba destinado en la comisaría sevillana de Alcalá de Guadaira. Según detallaron a Europa Press fuentes de la Guardia Civil, el cuerpo sin vida del policía fue trasladado en un primer momento al puerto de Conil de la Frontera. Por su parte, fuentes policiales aseguraron que el director general de la Policía, Ignacio Cosidó, se encontraba de camino a la zona cuando han localizado el cuerpo del policía desaparecido.
“Un orgullo”
Por su parte, el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, mostró ayer su solidaridad y su pésame a la familia del agente y destacó que este agente es un “orgullo” para el Cuerpo Nacional de Policía. En declaraciones a los periodistas, Fernández Díaz destacó la “trágica, triste, pero heroica acción” del agente, que no dudó en poner en peligro su vida para salvar la de otros ciudadanos que se encontraban en apuros en aguas de la playa de El Palmar, en el término municipal de Vejer de la Frontera.
El titular de Interior subrayó que “es un orgullo” que en el Cuerpo Nacional de Policía existan agentes tan “dignos de ser admirados” como héroes y servidores públicos.
