Las fiestas más señaladas de la época navideña ya han pasado, salvo el día de los Reyes Magos, y Antonio Tocino propietario de las viviendas de Majadillas Bajas, que fueron demolidas en el pasado mes de diciembre, continúa con su huelga de hambre. Son ya ocho días que el chiclanero, de 64 años, se encuentra en la puerta de la Gerencia de Urbanismo pidiendo que no se actuó correctamente con sus viviendas. El domingo el portavoz del DIPA emitía un comunicado diciendo que la sentencia no era para el derribo de las casas, sino para entrar en las mismas.