Relativa cómoda victoria del Córdoba ante un Mérida en horas bajas en un partido que pudo estar marcado por la expulsión de Kike Márquez en el minuto 3 de juego pero que fue casi una anécdota, al igual que el gol en propia puerta de Gudelj, por la superioridad constante los blanquiverdes.
Los de Iván Ania saltaron al terreno de juego con la clara intención de volver a la senda de la victoria y de hacerlo en casa, después del tropiezo de la semana pasada en Algeciras. Lo hacían con tres cambios en el once, Lapeña, Casas e Isma Ruiz, sustituyeron a Carlos García, Toril y al sancionado Álex Sala.
Intensidad desde el principio cuando no pasaban los tres minutos de juego y Cambronero González expulsó correctamente a Kike Márquez, que ya suma dos rojas directas en las 8 jornadas.
No tuvo grandes problemas el Córdoba para dominar el partido y hacer su fútbol a pesar de ir con uno menos, y en el 23’ Casas adelantaba a los locales que diez minutos más tarde veían como se igualaban las fuerzas por la expulsión de Busi por doble amarilla.
Los de Ania tuvieron el control del partido hasta que en el 81’ Adilson casi sentenció el encuentro que por número de ocasiones pudo acabar en goleada, pero que terminó con un autogol de Gudelj que, aunque sea anecdótico en este caso, vuelve a no conseguir dejar la portería a cero.
Con la segunda victoria consecutiva en El Arcángel, el Córdoba se coloca octavo, con 12 puntos, y el lunes descansará para volver al trabajo el martes y preparar el partido del próximo domingo a las 20:00h. ante el Atlético Sanluqueño.
