Respecto a la asociación nacional, como ha informado Felipe Molina, presidente de ambas entidades, “ha sido creada para para tener voz en los foros donde se debatan asuntos relativos a políticas estatales y europeas”, mientras que la andaluza se dedicará a “defender los intereses de los ganaderos regionales y ser su voz ante los problemas andaluces”.

La creación de la asociación andaluza es la primera y no será la única. La idea es que vayan proliferando asociaciones en todas las regiones bajo el paraguas de la asociación nacional, por lo que en un futuro no se descarta llegar a formar una federación.

Los objetivos de las dos asociaciones presentadas hoy son idénticos: unir a los profesionales del sector y tener representación propia en todas las mesas de trabajo cuyas medidas afecten a su actividad, desde foros hasta la elaboración de políticas agrarias europeas.