Casi una veintena de incidencias trascendieron este miércoles a consecuencia, una vez más, de las fuertes rachas de viento y las lluvias registradas.
La jornada estuvo marcada por un intenso viento, en la que las rachas alcanzaron los 83 kilómetros por hora. Como consecuencia, Córdoba tuvo activado el aviso amarillo y los bomberos tomaron protagonismo ya que, hasta las 17.00 horas, tuvieron que atender cerca de una veintena de incidencias.
Especialmente, los avisos que ocuparon a los bomberos fueron por árboles y ramas, carteles o mobiliario urbano desprendido, como farolas, cornisas y vallas.
A todo ello, se suman las deseadas precipitaciones que acompañan a la borrasca Hipólito, que entró este pasado martes en toda la provincia. Córdoba, amaneció ayer y hoy con sus calles encharcadas, una estampa que ha alegrado a los cordobeses, después de que las precipitaciones hayan dejado, en las últimas 24 horas, más de 17 litros por metro cuadrado en la capital y más de 25 litros de agua por metro cuadrado en algunos puntos de la provincia.
Según las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología, las precipitaciones seguirán hasta el viernes en la capital, donde además habrá tormentas.
