CSIF expresa su preocupación y condena firmemente los graves incidentes ocurridos ayer en la Prisión de Alcolea protagonizados por internos y que se saldaron con tres funcionarios agredidos de diversa consideración. El sindicato lamenta la inacción del Ministerio del Interior a la hora de poner en marcha medidas concretas para que los profesionales penitenciarios puedan desarrollar su labor con seguridad.
Los hechos tuvieron su inicio en la tarde de ayer cuando se produjo una pelea entre tres internos del módulo 10, uno de los más conflictivos del centro penitenciario. A uno de los presos, antes de ser trasladado al módulo de aislamiento por estos hechos, se le iba a realizar un cacheo previo por parte de los funcionarios, momento en el que el interno propinó varias patadas y puñetazos por todo el cuerpo a uno de los profesionales, que le ocasionaron moratones y contusiones de gravedad y que requirieron, inicialmente, atención en la enfermería y, posteriormente, en un centro hospitalario de Córdoba. Otros dos funcionarios fueron golpeados en ese incidente, pero no sufrieron lesiones de gravedad. Posteriormente, al interno agresor se le encontró un objeto punzante y afilado de fabricación casera.
A continuación, otro interno destrozó el cristal de una puerta de seguridad e intentó iniciar un motín en el citado módulo al grito de: “Ya es el momento de reventar todo esto”. Esta situación generó un tumulto considerable en los primeros momentos, aunque finalmente las intenciones del preso no fueron secundadas por el resto de sus compañeros. Por todo ello, el interno fue trasladado a un módulo de aislamiento por varios funcionarios que acudieron al lugar rápidamente como refuerzo y apoyo a esa unidad. Paralelamente, otro interno en un módulo anexo se negó a entregar a los profesionales la droga que se le había detectado en un cacheo, momento en el que se abalanzó sobre uno de los trabajadores que consiguió repeler el ataque. Igualmente, fue trasladado a aislamiento por estos hechos.
CSIF Prisiones recuerda que ya ha informado en otras ocasiones al equipo directivo de la prisión de las tensiones que se generan en estos módulos conflictivos. El sindicato subraya la profesionalidad de la plantilla del Centro Penitenciario de Córdoba, que gestiona estas alteraciones regimentales con rapidez y eficacia para garantizar el orden, la disciplina y la seguridad, al mismo tiempo que se involucra en programas de tratamiento que contribuyen a la reinserción.
“Desde CSIF deseamos una pronta recuperación a los funcionarios agredidos y solicitamos a la Dirección del centro el traslado inmediato de los internos agresores, además de volver a reivindicar una vez más la condición de Agentes de la Autoridad para los profesionales de Instituciones Penitenciarias un aumento considerable de personal, una adecuación de los medios de protección y una formación continua y actualizada a fin de que no vuelvan a producirse estas situaciones e incidentes tan desagradables”, concluye la central sindical.
