El italiano Nicolo Zaniolo, jugador del Roma que manifestó su deseo de salir del club en este mercado invernal aunque finalmente permanecerá en la entidad, que lo ha inscrito para las competiciones de la UEFA, estará 30 días de baja tras presentar un documento médico que dice que necesita descansar debido al estrés.

El jugador acudió esta mañana a Trigoria, la ciudad deportiva del club, para someterse a controles y el examen médico ha confirmado la necesidad de reposo como se indicaba en el certificado que presentó el jugador al club el pasado 31 de enero, según los medios locales.

Por ello, se le ha concedido un periodo de descanso, tras el cual se programará un nuevo examen por parte del club, que le ha incluido en la lista de jugadores para la UEFA, aunque se trata sólo de una decisión formal mientras ambas partes deciden sobre la situación.

Zaniolo tiene contrato con el Roma hasta 2024 y el delantero tomó la decisión unilateral de querer abandonarlo en el mercado invernal, pero el club no estaba dispuesto a dejarlo salir a cualquier precio ni de cualquier manera.

El Milan estuvo interesado pero las cifras manejadas entre ambos clubes eran muy lejanas. Apareció el Bournemouth inglés con 30 millones, pero Zaniolo rechazó la oferta, una decisión que no sentó bien ni a la directiva, ni al entrenador, Jose Mourinho, ni a la afición.

El pasado lunes, el jugador tuvo que llamar en la madrugada de a la policía tras ser amenazado de muerte por un grupo de aficionados que se presentó en su domicilio para increparle por no querer continuar vistiendo la camiseta de la 'Loba' y, además, por haber rechazado la oferta del Bournemouth.

Esa misma noche se colocó también una nueva pancarta en Trigoria con un mensaje dirigido al futbolista de 23 años: "Fuera de Trigoria los hombres de poco valor, cobardes y aprovechados... ¡Apoyo incondicional sólo para los que respetan nuestros colores!".

No es solo la afición romanista la que reprocha la decisión a Zaniolo. También lo hizoMourinho, que hasta ahora había sido siempre defensor de uno de sus futbolistas de confianza, pero con el que ya no cuenta desde el pasado 15 de enero, hace ya tres jornadas.

"Desgraciadamente, lo que dije después del partido ante el Spezia parece que se está convirtiendo en realidad. Esperaba que se quedara, pero a día de hoy añadiría 'por desgracia'", dijo tajante en rueda de prensa el setubalense el pasado sábado.

"Lleva un mes diciendo que quiere irse. Si alguien siempre dice a todo el mundo que no quiere vestir la camiseta del Roma, tengo que decir que 'por desgracia'", añadió.