El español Alberto Contador (Trek Segafredo) se ha mostrado este martes un poco decepcionado por el resultado de la primera etapa de montaña, pero ha querido ser optimista y ha expresado su confianza en que en la Vuelta se le pueda ver "en plan atacante".
"No es una noche en la que haya descansado mucho. Lo que me pasó fue muy extraño y pensamos que fue algo relacionado con la digestión, pero el sitio en el que estuve ayer no es el mío", dijo el madrileño antes de tomar la salida en la cuarta etapa de la prueba entre Escaldes Engordany y Tarragona, sobre 198,2 kilómetros.
Contador ha explicado que "una de las soluciones" que ha probado para mejorar ha sido tratar de hidratarse "lo máximo posible durante toda la noche". "Ahora toca recuperarme en los próximos días y tenemos que esperar a ver qué sensaciones tengo", ha comentado.
El ciclista de Pinto, que se despide como profesional en esta edición de la Vuelta a España, perdió más de dos minutos y medio en relación a los primeros clasificados en la etapa de este lunes con final en Andorra, en la que se impuso el italiano Vincenzo Nibali (Bahrain) y el británico Chris Froome (Sky) se vistió el maillot de líder.