La exdirectora de la Alhambra María del Mar Villafranca ha lamentado este viernes el "vía crucis" sufrido hasta ser absuelta en el caso Audioguías, por el que no se sintió del todo "arropada" por algunas personas del gobierno socialista de la Junta ni del PSOE, y por el que cree que ha pagado "muy alto".
"Ha sido muy duro lo que he tenido que vivir. He pagado muy alto ser la directora del Patronato de la Alhambra once años", ha sentenciado en un encuentro con periodistas, tras ser absuelta por la Audiencia de Granada junto a dos exmiembros de la cúpula del monumento y a un empresario, juzgados por las supuestas irregularidades en la gestión del servicio de audioguías.
Aunque Villafranca -quien ha defendido su "derecho a la palabra" fuera de "cualquier tipo de sigla" política o institución- no ha querido presentarse como "víctima", ha lamentado haber sido sometida a un "juicio público" y estar "casi condenada a la pena de banquillo".
También se ha referido a la que considera "detención ilegal" a la que fue sometida por parte de la Policía, dado que esta no contó con orden judicial o de la Fiscalía, acaecida por este caso en junio de 2015 y que tratará ahora que quede anulada y eliminado todo rastro.
Después de que se apuntara que el fraude podía superar los cinco millones de euros, la exdirectora de la Alhambra cree que "lo más relevante" es que se haya demostrado que no existió perjuicio económico para el Patronato.
"En su día ya dije que se trataba de un expediente que podía haber tenido incidencias, pero ninguna de carácter penal y eso es lo que ha dicho la sentencia", ha recalcado la exdirectora, quien se siente satisfecha con el fallo absolutorio, si bien ha apostillado que el tiempo "tan dilatado" transcurrido desde que saltó el caso -hace más de siete años y medio- le deja "una alegría a medio tiempo".
Tras censurar que un tema puntual por un contrato de audioguías se convirtiera en "causa general" contra la gestión de la Alhambra, ha advertido del "desgaste" que la instrucción judicial y la vista oral ha sido para ella, para su familia y para el propio Patronato público que gestiona el conjunto monumental más visitado de España.
En su opinión, se podían por tanto haber ahorrado "esfuerzo, tiempo y daño" a pesar de que el expediente investigado -que contó con informes favorables del gabinete jurídico y estuvo fiscalizado por intervención- llegó a "inflarse artificialmente" para buscar "lo que no había".
"Siempre buscamos el interés general del monumento. Todas nuestras acciones terminaron con el cobro de hasta el último céntimo que debía la empresa", ha insistido Villafranca.
CRÍTICAS A LA EXCONSEJERA ROSA AGUILAR
Por otra parte, ha sido especialmente crítica con la que fuera consejera de Cultura Rosa Aguilar, por haber abierto una auditoría al Patronato que "nadie pidió" y "suelta de manos", sin el acuerdo preceptivo del Consejo de Gobierno y del pleno del monumento, que se usó a su juicio para buscar un documento que ayudara a la Junta a "mantener la causa".
Dicha auditoría terminó formando parte del sumario de la causa judicial por la que ahora ha sido absuelta y, a raíz de la misma, el auditor -actualmente el director general de la Agencia IDEA- apuntó al menoscabo de fondos públicos en varios contratos, entre ellos el de las audioguías y las tiendas del monumento.
Todo ello ha conllevado que el Tribunal de Cuentas haya considerado a Villafranca "responsable contable directa" por esos dos contratos y la haya condenado al pago de 404.265 euros en una sentencia que ella ya ha recurrido y frente a la que va a aportar la nueva resolución absolutoria de la Audiencia de Granada.
Preguntada sobre si se sintió arropada por su partido, ha asegurado que determinadas personas del PSOE sí entendieron todo el proceso como un "ataque político instrumentalizado", mientras que no se sintió "arropada ni mucho menos" por otras, algunas de ellas con altas responsabilidades en Cultura.