La Asociación de Empresarios de Comercio y Servicio de Automoción de Huelva (Comseauto) han elogiado el "esfuerzo" que realiza la Unidad de Policía adscrita a la Junta de Andalucía para la erradicación de los talleres ilegales de vehículos en la provincia onubense.
En un escrito dirigido a dicha unidad de Policía, Comseauto, organización integrada en la Federación Onubense de Empresarios (FOE), ha destacado la labor del cuerpo policial autonómico para el esclarecimiento de las denuncias presentadas contra talleres de reparación de vehículos que incumplen la normativa vigente, lo que supone en algunos casos una agresión al medio ambiente por el vertido de residuos tóxicos, según ha informado la Junta.
"Con vuestro trabajo habéis colaborado con esta organización en el objetivo de impedir la práctica de la competencia desleal y de la economía sumergida que tan gravemente perjudica a los talleres legalmente establecidos", ha señalado el presidente de los representantes de los empresarios de la automoción onubenses, Darío García Pastor.
En una nota, la Junta ha informado de que la Unidad de Policía adscrita ha intensificado la campaña contra los talleres mecánicos ilegales en toda Andalucía con la realización de un total de 1.407 inspecciones durante 2014, 168 más que en el año anterior. Y como consecuencia de esas actuaciones inspectoras, los agentes han levantado 312 actas de denuncia.
La Policía de la Junta se ocupa en sus inspecciones de comprobar la vigencia de los permisos y licencias para el ejercicio de la actividad en estos establecimientos de reparación de vehículos, así como de verificar si hay un adecuado tratamiento de los residuos tóxicos que se generan en los talleres como aceites y otros líquidos que pueden suponer un riesgo para el medio ambiente y la seguridad de las personas.
Así, la Junta ha indicado de que las infracciones más frecuentes denunciadas durante el pasado año por la Policía en los talleres mecánicos andaluces fueron la carencia de una licencia municipal para ejercer esta actividad y no estar inscrito el propietario del establecimiento en el Registro de Pequeño Productor.