Según un estudio realizado por un equipo de
investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), el incremento de temperatura previsto para mediados de siglo impedirá la actividad de los microorganismos que son responsables de la
crianza biológica de los vinos del Marco de Jerez.
Según ha explicado la Universidad en una nota, los investigadores han monitorizado "durante varios años" el comportamiento térmico de una bodega para, posteriormente, desarrollar y validar un modelo informático de simulación energética de ese edificio.
Según los modelos de predicción, para mediados de siglo la temperatura media exterior en la zona de Jerez aumentará en 2,3°C, una subida que será "aún más acusada" en los meses de verano, "con incrementos de hasta 4°C", ha indicado Fernando Ruiz, profesor de la UPM y uno de los autores del estudio. Como consecuencia,
la temperatura en el interior de la zona de envejecimiento "superará los límites del confort térmico para la actividad de los microorganismos", lo que "pone en peligro el proceso de producción en su modelo actual", ha apuntado.
Para llevar a cabo la crianza biológica de estos vinos en las denominadas bodegas, son necesarias unas condiciones ambientales "muy sensibles y limitantes, con abundante presencia de oxígeno". Sin embargo,
este tradicional proceso de producción, "tan fuertemente influenciado por las condiciones climáticas del entorno, se puede ver afectado por el fenómeno del calentamiento global", como ha manifestado el estudio de la UPM.
"El incremento de temperatura que ocasionará el cambio climático podría afectar a la efectividad de las bodegas catedral, poniendo en riesgo la crianza biológica, al superarse los límites para la actividad de los microorganismos implicados", han subrayado los autores.
El estudio, llevado a cabo por los investigadores Eduardo G. Navia-Osorio, César Porras-Amores, Fernando R. Mazarrón e Ignacio Cañas, de la ETSI Agronómica, Alimentaria y de Biosistemas y la ETS de Edificación de la UPM, "demuestra la necesidad de desarrollar un plan de adaptación y resiliencia para mantener la producción y características organolépticas de los vinos de Jerez".
El modelo de simulación desarrollado y validado permitirá analizar la efectividad de nuevas estrategias de adaptación de los edificios a los cambios que se producirán en las próximas décadas. "Más allá de este caso concreto, el estudio pone de manifiesto la necesidad de analizar el impacto del cambio climático en los edificios de energía casi nula, para seguir manteniendo modelos de producción sostenibles", han señalado.
El estudio se ha realizado en el marco del proyecto 'Estrategias de diseño bioclimático en bodegas como modelo de edificios de consumo de energía casi nulo', financiado por el Ministerio de Economía y Competitividad.