No pertenece a los denominados “robos de la crisis”, pero sí se ha vuelto habitual. Lo de bajar de casa y comprobar estupefactos que el coche no arranca y no hay opciones de enganchar los cables porque la batería ha desaparecido empieza a ser un capítulo que se repite más de la cuenta. Sin ir más lejos, hace sólo cuestión de días una vecina de la urbanización Los Villares ha visto cómo por segunda vez en dos semanas le ha vuelto a pasar lo mismo. En esta ocasión constató que le había vuelto a pasar y que a su padre, que había estacionado al lado, también le había ocurrido lo mismo.  La “fiesta” le ha costado 140 euros en 15 días, y tiene claro que tendrá que cambiar de aparcamiento o buscarse la vida para que no se sigan cebando con su vehículo.
Su testimonio no es aislado. Jesús tiene un taller y asegura que en los últimos meses le han venido casi una decena de clientes con el mismo caso. Como precisan, bastan apenas unos minutos para levantar el capó, quitar las dos terminales, y arramplar con la batería, las más modernas incluso traen dos asas que “facilita” esta acción pues basta tirar sin ni siquiera “mancharte las manos”, explica Antonio, mecánico de toda la vida. Pero no sólo se las llevan de los automóviles aparcados, en los talleres son una de las piezas “más cotizadas”, y él mismo ha visto a plena luz del día como las baterías viejas que tenían depositadas a las puertas  junto con una que usaban para arrancar los motores para llevarla al desguace han desaparecido.
“La cogen porque les dan seis euros por batería, esto es como lo que pasa con el cable de cobre, y hay sitios piratas que la compran, ese es el problema”.
  De hecho, puestos en contacto con la chatarrería Pedro Mora, coinciden con dicha cifra, 6 euros, teniendo en cuenta que el precio ahora mismo del kilo, a 61 céntimos, ha bajado. Si los establecimientos cumplieran la normativa, como es el caso de este, no tendrían que recoger ni pagar por una batería entregada ese estado, pero no siempre eso es así.
“No recogemos batería como no sea de una empresa, puesto que tienen que tener el número que asigna Medio Ambiente por tratarse de un gestor de residuos peligrosos, pero creo que hay otros almacenes que sí la recogen”.