Los casos de sida en Málaga han bajado un 14% en el último año y un 92% con respecto al año de máximo pico de la epidemia. Así lo ha puesto de manifiesto este jueves la delegada de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, Ana Isabel González, durante su visita al centro de salud Rosaleda-La Roca, donde se ha instalado una mesa informativa y se ha realizado test rápido de detección, con motivo del Día Mundial de la Lucha contra el Sida, que este año se celebra bajo el lema ‘Levantemos la manos por la prevención del VIH-Sida’.
Así, la delegada ha afirmado que “no hay que bajar la guardia” y ha recordado que el preservativo “es la mejor y la única herramienta contra esta infección”. El Gobierno andaluz desarrolla su estrategia de acción contra esta enfermedad a través del Plan Andaluz frente al VIH/sida y otras Infecciones de Transmisión Sexual (ITS) vigente desde 2010. Los datos aportados por el Plan indican que, el año pasado se notificaron en Málaga 23 nuevos casos de sida (1,41 casos por 100.000 habitantes), lo que supone un descenso del 14% respecto a 2014 (27 casos) y del 92% en relación a 1995, año en que se alcanzó el pico máximo de casos (285 casos), con¬firmándose así, un año más, la disminución continua y progresiva de los mismos.
Por otra parte, en 2015 se notificaron en Málaga 190 nuevas infecciones por VIH, lo que supone una tasa de incidencia de 11,66 casos por 100.000 habitantes, superior a la de Andalucía (7,87 casos por 100.000 habitantes). El 88,9% de ellas ocurrió en hombres y el 11,05% en mujeres, por lo que la proporción es de 8 nuevas infecciones en hombres frente a uno en mujeres. La categoría de transmisión más frecuente fue la de hombres que tienen sexo con hombres (HSH) (54,21%), seguida de la transmisión heterosexual (21,05%) y de los usuarios de drogas por vía intravenosa (UDI) (1,58%). No hubo ningún caso de transmisión madre-hijo.
Entre los logros más destacados en la lucha contra el VIH/sida en Andalucía está la puesta en marcha en 2013 de Registro Autonómico de casos de VIH (Sistema de Vigilancia de VIH/sida en Andalucía – SIVIHDA), lo que ha permitido conocer la magnitud, distribución, características y tendencias de la epidemia en nuestra comunidad. Estos datos posibilitan elegir las estrategias preventivas más convenientes y valorar si son efectivas.
Las nuevas infecciones en menores de 30 años
Los datos también reflejan que 26,81 infecciones por 100.000 habitantes se diagnosticaron en jóvenes menores de 30 años. Con el fin de prevenir el contagio en la población más vulnerable y en adolescentes y jóvenes en general, donde las cifras son mayores, la Junta viene distribuyendo material de prevención y poniendo en marcha acciones específicas.
Desde 2010 hasta 2015 la Consejería de Salud ha subvencionado proyectos autonómicos y provinciales de ONG’s relacionados con la prevención de la infección por el VIH y otras ITS, destinando cerca de 400.000 de euros en los mismos. Además, este año se han distribuido 137.716 preservativos masculinos y 44.940 unidades de lubricante.
Otra iniciativa importante para la detección de casos es el Programa de Diagnóstico Precoz de VIH mediante el uso de test rápidos de detección de anticuerpos, que se realiza a través de asociaciones y entidades andaluzas que trabajan en este ámbito comunitario, ha llevado a cabo entre finales de 2008, cuando se puso en marcha, y septiembre de 2016 un total de 683 pruebas, de las cuales 15 resultaron positivas.
Asimismo, para fomentar el diagnóstico precoz de la infección por el VIH e impulsar la incorporación a la práctica clínica habitual las recomendaciones del Plan Andaluz frente al VIH/Sida y otras ITS se diseñó un curso MOOC (online, masivo y abierto) de diagnóstico precoz y atención de la exposición accidental de la infección por VIH.
Asistencia sanitaria
Otro de los objetivos de la misma estrategia del Plan Andaluz frente al VIH/Sida y otras ITS es garantizar que todas las personas con infección por el VIH reciban atención sanitaria en el nivel más adecuado a su situación y accedan al tratamiento con criterios de calidad y equidad. El tratamiento antirretroviral disminuye de forma drástica la morbimortalidad e incrementa la expectativa de vida de los pacientes con infección por el VIH. Pero, además, mejora notablemente la calidad de vida, que ahora puede ser prácticamente normal para la mayoría de los pacientes.
En este sentido, en todos los centros sanitarios públicos de Andalucía se garantiza la asistencia a las personas con infección por el VIH y el acceso al tratamiento antirretroviral y a las terapias de las comorbilidades, incluyendo las personas inmigrantes. En 2015 recibieron tratamiento antirretroviral 4.245 pacientes en los hospitales de Málaga.
Unidad de Promoción y Apoyo a la Salud
La delegada de Salud también ha visitado la Unidad de Promoción y Apoyo a la Salud (UPAS) del centro de salud Rosaleda-La Roca que se creó en el año 2004. Su actividad se centra en la necesidad de captar la población especialmente vulnerable para desarrollar problemas de salud (principalmente frente a las infecciones de transmisión sexual).
En su cartera de servicios se incluye como actividad asistencial la información y asesoramiento sobre problemas de salud, diagnóstico y tratamiento de las Infecciones de Transmisión Sexual ( ITS ), cribado periódico a personas que ejercen la prostitución, consejo preventivo ante la solicitud de VIH y otras ITS, estudios y seguimiento de parejas serodiscordantes, consejo anticonceptivo e inserción de anticonceptivos de larga duración (DIU e Implante subdérmico), provisión de métodos anticonceptivos de barrera, administración de vacunas según indicación, valoración y derivación directa a especialistas según necesidades (principalmente Infecciosos, Dermatología y Ginecología).
Asimismo, la unidad incluye la atención social, informando y gestionando recursos, facilitar el acceso al Sistema Sanitario Público mediante gestión en la Base de datos Unica (BDU) y asignación de médico en Centros de Salud, coordinación con ONG y Entes Sociales que trabajan con estos colectivos, coordinación con Centros de Salud y Especialistas de referencia, realización de talleres de formación a diferentes colectivos, actividad docente y actividad de investigación.
La plantilla está compuesta por un médico, un enfermero, una trabajadora social y un administrativo. En el año 2015 atendió 2.463 consultas de enfermería, 3530 consultas médicas y 231 consultas de trabajo social. Así, el 54,2% de los pacientes atendidos son hombres y el 45,2% mujeres.