El primero de los cuatro detenidos, tres sacerdotes y un profesor de Religión de la Archidiócesis de Granada, por supuestos abusos sexuales a un joven cuando era menor de edad ha pasado a primera hora de este miércoles a disposición del Juzgado de Instrucción 4 de Granada, que investiga el caso, que se encuentra bajo secreto sumarial.
A los Juzgados de la Caleta han llegado pasadas las 8,35 horas dos coches, uno camuflado y otro de la Policía Nacional, que han trasladado al arrestado que, como los otros tres, había pasado su segunda noche en los calabozos de la Jefatura Superior de Policía de Andalucía Oriental. En la sede judicial hay un amplio despliegue de medios de comunicación desde primera hora de la mañana, así como un cordón policial que velan por la seguridad en la zona.
Según han informado a Europa Press fuentes policiales, el resto de los detenidos irá pasando ante el juez una vez que termine la comparecencia el anterior, con lo que las declaraciones podrían prolongarse por todo el día.
Este lunes se practicó un registro en una vivienda situada en una urbanización de Los Pinillos, en Pinos Genil (Granada), y el martes trascendió que hay una segunda denuncia sobre los hechos, que una persona presentó el mismo día ante el Juzgado de Instrucción 6 de Granada, que se encontraba de guardia.
Este segundo denunciante es un testigo que ya ha declarado anteriormente por el asunto y que amplía los datos que ofreció en primer lugar y también los nombres de los presuntamente implicados, por lo que el documento con su testimonio será remitido al juez instructor, el magistrado Antonio Moreno, titular de Instrucción 4.
El caso se encuentra bajo secreto de sumario, con el objetivo de que no trasciendan datos de la causa y de detectar a otras posibles víctimas, si las hubiera. El tiempo que esta medida puede estar vigente es el de un mes, aunque puede ser prorrogado sucesivamente.
Los arrestados forman parte de un grupo conocido como el de 'Los Romanones', por el nombre de su líder, uno de los detenidos, el padre Román M.V.C., y sus integrantes tienen un alto nivel económico y cuentan con varias casas en la provincia donde supuestamente se produjeron los abusos.
La víctima envió una carta contando su caso al Vaticano y ha llegado a recibir una llamada de apoyo del propio Papa Francisco, que le pidió perdón por todo lo padecidos. Tras la llamada del Papa al joven, éste formalizó una denuncia ante la Fiscalía Superior de Andalucía, que ordenó a la Fiscalía Provincial de Granada interponer 'ipso facto' denuncia contra todos los afectados.
EL PAPA: "LA VERDAD ES LA VERDAD"
El Papa se ha pronunciado este martes al respecto ante la pregunta de un periodista en el vuelo de regreso a Roma tras su discurso en el Parlamento Europeo y ha señalado que "la verdad es la verdad" y "no debe esconderse" en relación al asunto.
"¿Cómo lo he recibido? Con gran dolor, un gravísimo dolor. Pero la verdad es la verdad y no debemos esconderla", ha matizado el Pontífice, que ha recordado que él leyó la carta del joven que ha denunciado los hechos en primer lugar, en la que le relataba que sufrió abusos por parte de sacerdotes cuando era menor de edad, le llamó y le dijo: "Tú mañana vas al obispo".
Al mismo tiempo, según ha contado, él mismo escribió al arzobispo de Granada, Javier Martínez, para "comenzar los trabajos, hacer las indagaciones y seguir adelante".
LOS ACUSADOS DEFIENDEN SU INOCENCIA
Por su parte, los cuatro arrestados "no le encuentran explicación" a la denuncia presentada contra ellos y defienden su inocencia, según ha informado a Europa Press el letrado Javier Muriel, cuyo despacho, que está ubicado en Marbella (Málaga), representará a los acusados en el proceso que está abierto actualmente contra ellos.
El penalista, que ha participado en casos como el de 'Malaya', ha confirmado que los cuatro están "incomunicados" y no pueden hablar ni entre ellos y que recibieron "con absoluta sorpresa" la denuncia del joven de 24 años.
"No le encuentran explicación", ha señalado el abogado, que ha lamentado que el juez haya "limitado" su derecho de defensa, ya que "no se les ha permitido escoger letrado" y actualmente están siendo representados por abogados de oficio.