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Sábado 30/11/2024
 

San Fernando

Un martillo neumático ¿Les suena?

Otra vez vuelven a abrir el mismo tramo para meter una tubería de desagüe mientras piden una auditoría de costes a pesar de que no ha terminado la obra.

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Es como mínimo la segunda vez que se levanta el mismo tramo de la calle Real porque se han olvidado de algo y viene a colación como un ejemplo de las veces que en distintas zonas de la calle Real se han vuelto a levantar las losetas por los operarios, mientras que los coches y camiones levantan el resto.

Es el primer tramo que abrió la calle Real a primeros de septiembre de 2008, casi seis años ya y que en diciembre de ese mismo año se acomodó para que el consejero de Obras Públicas y Transportes de la Junta de Andalucía viniera a San Fernando, ofreciera una rueda de prensa en la que el entonces alcalde reconoció que no había estudio de viabilidad ninguno pero “si funciona en otros lugares por qué no va a funcionar aquí” y de colocaron unos paneles y se hicieron las primeras fotos oficiales de un tramo terminado.

Posteriormente, ya con las fotos publicadas, se levantó de nuevo porque –se dijo- que sólo se había terminado para que sirviera de ejemplo y acallara la cada vez más oposición a la forma en que se estaban haciendo las obras, sin respetar lo prometido de no comenzar un tramo sin terminar el anterior. Para entonces ya estaban levantados varios tramos a la vez.

También se dijo que una vez levantado se iba a corregir un pequeño problema en el que no habían caído, dejar margen en la plataforma tranviaria ante la eventualidad de un futuro cambio en el ancho de vía, algo en lo que no habían caído los responsables de la Junta ya que fue desde este medio de comunicación que se les advirtió de esa posibilidad.

Luego se demostró en los tribunales que no tenían ni proyecto de ejecución, por lo que se explican muchas de las cosas ocurrida a lo largo de estos casi seis años. Y se explica también que operarios de la empresa concesionaria de las obras estén ahora levantando ambos lados de ese tramo “para conectar una tubería de alcantarillado” que al parecer no se había conectado. 

No era que ya habían comenzado a arreglar la calle Real tal y como se ha acordado con el Ayuntamiento, con granito en los cruces y un carril de un material más resistente por el que pasarán los coches, porque esas obras acaban de salir a licitación junto al carril bici.

Ante las continuas obras en una calle que ya debería estar estropeada, pero del buen uso que se hubiera hecho de ella, no del abuso del tráfico por haberse hecho peatonal en vez de semi peatonal por mucho que quieran enmendar la plana ahora, es normal que los detractores del proyecto busquen motivos para meter el dedo en el ojo en la Junta, intentar comprometer el Ayuntamiento gobernado por el Partido Popular siempre contrario al trazado pero ya con ganas de termine todo e incluso algunas partidos que se suman al carro de una plataforma recién nacida cuya fuerza en la calle aún no ha puesto a prueba.

Tanto las sentencias que se dictaron sobre el proyecto –que la Junta dice que están superadas porque se reinició todo el procedimiento administrativo- como la ausencia de una auditoría que sí se ha hecho en otros sistemas tranviarios de otras ciudades, aunque en estos casos sí han terminado las obras y los tranvías han circulado aunque sea poco, son argumentos que mantienen la llama de la oposición viva, incluso pidiendo que se retome el proyecto por la Ronda del Estero y se quede peatonalizado el tramo desde la plaza de la Iglesia al Carmen.

Y el problema es que dentro de unos meses, una vez que culmine el proceso de licitación de las reparaciones en la calle Real, se volverá a levantar toda la arteria principal de la ciudad, presumiblemente después de dar plazos de tramos terminados y tramos comenzados, como al principio, sin que ya se sepa con exactitud por la ciudadanía cuánto de más ha costado una obra que no termina nunca.

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