La comunidad de regantes de La Algaida llegó a temer por una gran inundación tras la impresionante tromba de agua que cayó en la zona, sobre todo por espacio de dos horas. Aunque la situación siempre estuvo controlada, se vio obligada a encender los motores bomba que tiene ubicados tanto en la marismas como en otros lugares de este entorneo agrícola. El presidente de esta entidad, Antonio Lara, resalta que “lo que tuvimos que soportar fue una gran tromba de agua y no es normal recibir más de 50 litros en dos horas. Fue una gran cantidad de agua para evacuar en tan poco tiempo”.
A pesar de que hace varios meses que no se registraban precipitaciones en La Algaida aclara que “los campos se riegan todos los días, con lo no están secos totalmente”. Sí hace constar que “el nivel del agua en el Canal de Martín Ruiz estaba muy bajo y el terreno en la marisma estaba muy seco. La tromba de agua que cayó hizo que todo cambiara en dos horas, aunque lo más importante vino porque la situación estuvo siempre controlada”. Y añade que “afortunadamente dejó de llover porque si se hubiera repetido la cantidad de agua que cayó estaríamos hablando de una situación alarmante. Por momentos llegó a ser preocupante, aunque no se produjo el daño que llegamos a temer”.
Los regantes de La Colonia han soportado hasta el momento un año muy seco, una situación que empezó a ser preocupante. Lo que no se esperaba es que una impresionante tromba de agua estuviera a punto de producir daños de consideración en una población que depende de la productividad de los campos de cultivo. Afortunadamente, todo quedó en un susto que todavía persiste en muchas familias.
