Los futbolistas del Real Betis Joaquín Sánchez, Marc Bartra y Borja Iglesias, tres pesos pesados en el vestuario verdiblanco, aprovecharon este domingo el día de descanso en la concentración del equipo en Schladming (Austria) para asistir al Gran Premio del Mundial de automovilismo disputado en el circuito austriaco de Spielberg.
El Betis comenzó el pasado miércoles su primera concentración de pretemporada en el pequeño pueblo de Schladming, en el estado de Estiria, el mismo en el que se ubica el Red Bull Ring de Spielberg, y estos jugadores no dudaron en acercarse al circuito dada la proximidad y el descanso que el técnico chileno Manuel Pellegrini le concedió a su plantilla. En él también estuvo el mexicano Andrés Guardado, que apura sus vacaciones antes de incorporarse al grupo.
Joaquín, Bartra y Borja Iglesias tuvieron un breve encuentro con el piloto Carlos Sainz, con quien posaron para una foto y a quien le regalaron una camiseta del Betis con el dorsal 55, el número que luce en su monoplaza, según muestra una imagen difundida por Ferrari, la escudería del madrileño.
Estos tres jugadores béticos fueron invitados al Gran Premio de Austria por Ferrari en una carrera, a la postre, accidentada para Carlos Sainz, ya que tuvo que abandonar cuando rodaba tercero al incendiársele el motor de su coche a falta de quince vueltas para la meta.
También estuvo en el circuito austriaco de Spielberg, según se observó en las imágenes que él mismo publicó en sus redes sociales, otro referente en el vestuario del Betis, el centrocampista internacional mexicano Guardado, en su caso invitado por su compatriota Checo Pérez (Red Bull), quien, como Sainz, tampoco pudo acabar la carrera.
El piloto mexicano tuvo que retirarse tras una colisión con el Mercedes del inglés George Russell.