El proyecto piloto proMETEO Sevilla, que utiliza la ciudad como laboratorio urbano de pruebas, ha detectado un nuevo episodio de riesgo medio para la salud a partir del domingo 31 de julio y se caracterizará por temperaturas diurnas elevadas y en ascenso, como mínimo, hasta el martes. Aun así, se estima que las temperaturas nocturnas no serán tan altas como las alcanzadas durante la ola de calor Zoe.
Aunque se trata de un episodio de calor de riesgo medio, los técnicos de proMETEO Sevilla, que lidera el Centro de Resiliencia Adrienne Arsht Rockefeller Foundation, piden a la ciudadanía que, durante los próximos días, comprueben que familiares y amigos, especialmente si pertenecen a un grupo de riesgo, estén bien atendidos y sigan las recomendaciones sanitarias para afrontar este tipo de fenómenos, según informan en una nota de prensa.
Además, han señalado la importancia de seguir las recomendaciones sanitarias para prevenir un golpe de calor y permanecer atentos a los síntomas que provoca este tipo de trastornos. En este sentido, el sistema piloto en el que se basa proMETEO Sevilla monitoriza y examina la previsión meteorológica partiendo del análisis de las condiciones climáticas específicas de Sevilla a lo largo de su historia, así como de los datos de salud y mortalidad.
De este modo, el equipo de expertos ha desarrollado un algoritmo que diariamente analiza el estado de los episodios de calor y los relaciona con los posibles riesgos e impactos sobre la salud atendiendo a diferentes variables: la temperatura máxima; la temperatura mínima, relacionada con la falta de alivio nocturno; la humedad relativa; la duración del episodio de calor y las características del tiempo antes de darse el episodio.
Estos factores permiten que el sistema de monitorización de proMETEO Sevilla determine el nivel de gravedad y riesgos del fenómeno meteorológico en relación con las posibles afecciones a la salud de la población y se clasifique atendiendo a cinco niveles: riesgo muy elevado, riesgo elevado, impacto medio, impacto medio-bajo y sin impacto. Cada nivel de riesgo se corresponde con un sistema visual de información y con una serie de recomendaciones.
Para ello, "es esencial extremar las precauciones y tomar medidas preventivas en los próximos días". La exposición al calor extremo puede provocar deshidratación, mareos, agotamiento, insolación, pérdida de conciencia y otras emergencias médicas. Para afrontar esta situación, desde proMETEO Sevilla se aconseja tomar medidas preventivas y cuidar a aquellas personas del entorno familiar o personal que pueden ser más vulnerables --adultos mayores de 65 años, mujeres embarazadas, niños y especialmente bebés, personas con afecciones médicas preexistentes o enfermedades crónicas, personas dependientes o en riesgo de exclusión--.
Por otro lado, y teniendo en cuenta todos los indicadores, desde proMETEO Sevilla se recuerda a la población que nadie es ajeno al calor extremo, incluso las personas jóvenes y mejor preparadas físicamente pueden verse afectadas por las altas temperaturas, a pesar de no considerar que pueden ser vulnerables. De este modo, se proponen una serie de consejos básicos para afrontar una ola de calor tales como reducir los niveles normales de actividad física durante una ola de calor y procurar que personas vulnerables permanezcan en entornos frescos durante un episodio de calor extremo.
Asimismo, se recomienda evitar salir durante los tramos horarios centrales y eludir zonas en las que el sol incide directamente, aumentar la ingesta de líquidos, beber con frecuencia y sin esperar a sentir sed, para reducir los riesgos de sufrir impactos por el calor y utilizar prendas de colores claros y fabricadas con materiales como algodón fino o lino para evitar que el calor se concentre en la ropa.