El 'president' de la Generalitat, Ximo Puig, se ha mostrado consternado por las presuntas agresiones sexuales a dos menores de edad en Burjassot (Valencia) y ha advertido que este tipo de hechos "tienen que ver con alguna enfermedad social grave".
"Que aún haya una mentalidad machista que piense que los hombres pueden tener una cierta autoridad, privilegio o derecho sobre las mujeres me parece terrible", ha aseverado después de que un juez acordara dejar en libertad vigilada a los cinco detenidos, de entre 15 y 17 años, y de que Fiscalía lo haya recurrido.
Puig, en rueda de prensa, ha asegurado que le produce una "enorme consternación" y una "gran tristeza" tanto los hechos como las reacciones de los familiares de los detenidos, pero ha hecho hincapié en que "hay que ser absolutamente respetuosos con el trabajo de la Justicia: saber exactamente qué paso y en qué condiciones y quiénes realmente han sido las víctimas".
"NO CONFUNDIR VÍCTIMAS Y VERDUGOS"
"Desde luego, mi visión es que no se puede confundir nunca quiénes son las víctimas y los verdugos", ha recalcado, para mostrar su confianza en que "la Justicia llegue hasta el final y se sepa qué pasó realmente" para a partir de ahí tomar "las decisiones que corresponda".
Los hechos ocurrieron el pasado 16 de mayo en una casa abandonada de la localidad valenciana. En este caso se investiga una violación grupal a una menor de 12 años y otra individual a una niña de la misma edad. Estas chicas supuestamente habían quedado con los arrestados, a los que no conocían, a través de Instagram.
