El presidente de Apymeal, José Antonio Fenoy, explicó que el número de negocios que fracasa es muy superior a las nuevas empresas que abren sus puertas en la ciudad. Desveló que la mortalidad de las pymes es muy elevada y que el índice de empresas que logran subsistir durante los tres primeros años de vida es muy bajo.
Fenoy afirmó que las pequeñas y medianas empresas que han logrado resistir, sobre todo en el centro histórico de Algeciras, lo han hecho porque o bien han podido rebajar los costes o adaptado la oferta de alguna forma o dimensionarse. Así hay muchos comercios de la zona centro que han optado por cambiar su ubicación ya que estaban soportando rentas demasiado altas.
Sondeo
El informe de campaña que habitualmente realiza Apymeal refleja la pérdida de ventas en todos los sectores. El período de invierno se ha cerrado con una caída de las ventas del 40% en las empresas de calzado, un 20% en el sector textil, un 40% en equipamiento del hogar y un 15% en bebé y puericultura.
Las pymes relacionadas con la construcción han vuelto a liderar la bajada en las compras con un 70%. También el sector de la automoción ha experimentado un ligero descenso en estos primeros meses del año en relación a 2011, una situación que los profesionales achacan al aluvión de ofertas de bajo precio.
Según el sondeo realizado tan sólo el 1% de las empresas consultadas consideran la campaña de invierno buena o normal.
“Los datos son un auténtico desastre, la gente está muy abatida”, lamentó Fenoy.
Por zonas, las empresas que han perdido menos ventas son las que se encuentran ubicados en el centro comercial Puerta Europa. Para Apymeal se debe a que el cliente busca la comodidad que ofrecen las grandes superficies. “Las pymes estamos pagando la implantación masiva de los centros comerciales y no hemos logrado que la administración articule medidas para compensarnos”, afirmó el presidente del colectivo.
Otro dato a destacar del informe elaborado por la asociación de la pequeña y mediana empresa algecireña es que sólo un 33% de la población compra habitualmente en el centro de la ciudad. Aunque si bien es cierto que el colectivo señala que se trata de un dato generalizado en otros municipios.
“Las pymes somos tanques que lo resistimos todos, pero pronto se nos puede acabar el combustible”, advirtió el presidente de Apymeal.
Revisión
Actualmente Apymeal está pendiente de que el Ayuntamiento de Algeciras realice la revisión del mapa comercial de la ciudad, que no se ha actualizado en 30 años. Por aquel entonces la calle Tarifa era una zona comercial de primer nivel con los almacenes Mérida como símbolo de la época. Igualmente eran atractivas para el comercio la calle Huertas, Emilio Castelar o la Acera de la Marina. 30 años después la situación ha dado un giro de 180 grados y la actividad comercial de la ciudad se centra prácticamente en la calle Regino Martínez y aledaños.
La importancia de la actualización del mapa del comercio radica básicamente en que designa el nivel de las calles y por tanto el coeficiente sobre el que el Consistorio aplican los impuestos. Aunque de todas formas la calle más cara de Algeciras a nivel de negocio es la calle Regino Martínez.
Para Apymeal una ciudad de 120.000 habitantes no debe centrar toda su actividad comercial en una única calle como lo hace Algeciras con la calle Ancha.
Por ello José Antonio Fenoy recordó la propuesta realizada por Apymeal hace unos meses al equipo de gobierno que consistía en la creación en la calle Tarifa, en concreto en el solar donde estuvo ubicado Almacenes Mérida, de un centro comercial y un aparcamiento municipal en el entorno de la plaza Juan de Lima. A este proyecto se uniría las intenciones del Ayuntamiento de dotar de contenido el edificio del Gobierno militar y conectar la zona con el nuevo paseo del río de La Miel y el Llano Amarillo una vez concluyan las obras de reordenación.
El estudio llevado a cabo por Apymeal cuantifica el proyecto en unos 9,5 millones de euros, se reserva una parte de este dinero, unos 2 millones de euros para la mejora del mercado Ingeniero Torroja,principal foco de atracción de la clientela a la zona baja. Además Apymeal cree que con el alquiler de los locales del centro comercial y el aparcamiento se podría amortizar la inversión inicial.
Asimismo el colectivo de pequeña y mediana empresa considera que el Ayuntamiento debe revisar los impuestos que pagan el pequeño comercio, demasiado elevados a juicio de la mayoría de los empresarios consultados.
También solicita la disponibilidad horaria de recogida del embalaje y lamenta que no cuenten con un punto limpio a pesar de que pagan religiosamente una tasa de basura industrial.
Apymeal considera que gracias a este proyecto se podría revitalizar la zona baja de Algeciras, crear empleo y aumentar la actividad comercial de la ciudad.
Para José Antonio Fenoy, el futuro del comercio en la ciudad pasa por el pueblo de Algeciras. “Los ciudadanos tienen que entender que hay que cerrar el círculo productivo de riqueza. Hay que consumir en las empresas de la ciudad ya que si a ellas les va bien se crearán puestos de trabajo y redundará en el bienestar de todos”, puntualizó.
Por otro lado, Apymeal está pendiente de que el Ayuntamiento de Algeciras haga frente a las deudas que mantiene con algunas pymes. Hasta el pasado jueves tenían de plazo las pymes para reclamar, según marca el nuevo decreto.
Dinamización
El Ayuntamiento de Algeciras tiene intención de poner en marcha actividades de animación en el centro los fines de semana con el objetivo de dinamizar esta zona del municipio los sábados.
Éste es el acuerdo al que llegaba la teniente de alcalde delegada de Feria y Fiestas y Mercados, Juana Cid, y el presidente de la Asociación de la Pequeña y Mediana Empresa de Algeciras (Apymeal), José Antonio Fenoy, en el transcurso de una reunión de trabajo realizada esta misma semana.
De esta manera, cada sábado serán programadas actividades de ocio dirigidas a toda la familia, con especial atención a los más pequeños.
El calendario de acividades comenzaba ayer con un espectáculo de la empresa Animagic en la Plaza Alta.
Cid explicó que “uno de los objetivos del equipo de gobierno es el de apoyar en la medida de nuestras posibilidades al sector comercial de la ciudad, que también se ve afectado por la situación de crisis, por lo que desarrollar actividades de animación supone un atractivo añadido para que los ciudadanos puedan acercarse a las tiendas”.
Por su parte, Fenoy consideró clave que el comercio se aproveche de que parece que al fin los fines de semana en el centro se está observando más ambiente. Por ello cree necesario que la administración ponga de su parte para animar a los ciudadanos a acudir al centro.
Rebajas
Los comerciantes del centro de la ciudad están de acuerdo en que el cliente ahora busca rebajas y descuentos todo el año.
“Ellos buscar rebajas pero a nosotros no nos bajan el precio del alquiler ni los impuestos”, aseguró Gabriela González, propietaria de la tienda de complementos Igual-Da ubicada en la calle Alfonso XI.
Igual-Da lleva funcionando seis meses, y su propietaria explicó que “los tres primeros meses el negocio iba bien, pero en noviembre hubo un parón, nos recuperamos en Navidad y desde enero vamos cuesta abajo”.
Gabriela afirma que abrir un negocio en la calle Alfonso XI es muy caro y ya comienza a ver como comercios vecinos se marchan a otras zonas de la ciudad buscando rentas más bajas, es el caso de una zapatería que hasta hace unos meses se ubicaba en la calle.
No se trata de un caso aislado porque basta con dar un paseo por el centro de Algeciras para observar como multitud de tiendas han cambiado de calle en los últimos meses buscando alquileres más bajos o mejores zonas comerciales.
Para Gabriela la apertura del centro comercial ha perjudicado mucho al pequeño comercio. “Hay clientes que vienen y me dicen que no conocían la tienda porque nunca bajan al centro”, dijo.
Maria del Carmen García, regenta la tienda de moda infantil y de flamenCa Carmín en la calle Cristóbal Colón. Lamentó que desde octubre de 2011 las ventas han caído estrepitosamente.
También se quejó de los altos impuestos y coincidió en señalar que el cliente cada vez busca pagar menos.
Mari Carmen consideró que el centro histórico está muy abandonado y a los comercios allí instalados sólo les salva el trasiego de las mañanas, gracias en parte al mercado Ingeniero Torroja.
