Despide la jornada la comparsa de Nene Cheza y Zampi, payasos tristes que se pintan dos coloretes para afrontar las adversidades. Sus formas teatrales y alegres se tornan en rabia para interpretar un primer pasodoble dirigido al “españolito” al que molesta el acento andaluz, que no deja de ser una señal de clasismo pues “piensas que es el acento de un pueblo pobre”. Bien llevado. El tono se vuelve áspero en el segundo, para denunciar que el Carnaval de hoy no se parece al que conocieron antaño, el que no se arrugaba frente al poder. Recuerdan que “gaditanos acabaron fusilados solamente por cantar”. Flojos los cuplés.
Lo mejor El mensaje del primer pasodoble en defensa del acento andaluz
Lo peor Los cuplés flojean bastante y no está la cosa como para dejar escapar puntos...